En el marco del Día Mundial de los y las Sin Techo, la Federación Uruguaya de Cooperativas de Vivienda por Ayuda Mutua (FUCVAM), organizó un debate en torno a la vivienda en el que participaron el Presidente de nuestra Federación, Enrique Cal, la Arquitecta e integrante La Vivienda en Diálogo, Ivahanna Larrosa, el Secretario General de FECOVI, Daniel Logaldo, la Presidenta de la Secretaría de Derechos Humanos, Collette Spinetti, la Ministra de Vivienda, Tamara Paseyro y el Senador de la República, Gustavo González.
El Presidente de FUCVAM, Enrique Cal, terminó las ponencias defendiendo el modelo del cooperativismo de vivienda. Para luego agregar que, si bien celebraba “el impulso y la orientación” del Plan Quinquenal de Vivienda” en el diseño, de la política no había que inventar “el agua caliente”.
“Saludamos el impulso y la orientación del Plan Quinquenal de Vivienda, creemos que desde el cooperativismo, FUCVAM en particular, ofrece una vivienda digna a varios sectores de la población”, indicó el Presidente de la Federación. “No hay que inventar el agua caliente, ya está inventada, hay que explorar, ser atrevido y tener el coraje de implementar medidas, y eso le corresponde a los tomadores de decisión”, concluyó.
“Hay una construcción política añeja en nuestro país vinculada al nacimiento de las cooperativas. Cuando se afirmaba que solamente accedía a una cooperativa la población con ingresos fijos, que tenía capacidad de repago, que tenía determinado estatus frente a la clase popular. Pero nuestro surgimiento fue obrero: hoy ese imaginario se que se construyó ha sido reiteradamente cuestionado e interpelado por los cambios en la sociedad, FUCVAM incorporó a compañeros y compañeras que pertenecen a sectores de extrema vulnerabilidad”, enumeró Cal.
Sostuvo que en la Federación actualmente se estaba formando una cooperativa “Gente de Calle” con la finalidad de garantizar un techo, “pero no son las pioneras, hay muchos compañeros que salieron de asentamientos, que resistieron políticas y soluciones neoliberales de la década de los 90, como son los compañeros de Franja 1”, argumentó.
Si bien representa un gran “desafío organizarse”, el sistema cooperativo como “solución colectiva a un problema mucho más serio que solo un techo, sino que establece una forma de romper una cultura de vida, una cultura de exclusión atravesándola con la dimensión del vivir en colectivo”.
“Cada vez que asume un nuevo gobierno tenemos la firme esperanza de que se logren los planes que plantean, y ahí no se juega solamente con la suerte del cooperativismo, también se juega con la suerte de los compañeros que viven en situación de calle, con la suerte de quienes viven en zonas inundables, con la suerte de quienes viven en la ruralidad”, aseguró para indicar que el movimiento cooperativista ya sabía que “pensar en la vivienda era pensar en el ordenamiento territorial, analizando movimientos migratorios y estudiando la concentración de la población en un territorio”. En este sentido, aseguró que tanto FUCVAM, como FECOVI y MEVIR tenían un problema con “los cupos libres” – viviendas desocupadas que siguen largo tiempo sin ocupar-.
Como Derecho Humano, si “las cooperativas” piensan que la vivienda es más que “un techo y unas paredes”, la vivienda es “ese espacio común y comunitario en el cual crecen niños, donde se desarrollan las infancias y crezcan escuchando los valores cooperativos, solidarios, con el acento puesto en el nosotros no en el yo”, aseguró con firmeza el Presidente de FUCVAM.
Cal informó que el Presupuesto presentado y aprobado en Diputados, “nos queda corto”. Es más, consideró que las prioridades del gobierno, incluidas en el Plan Quinquenal de Vivienda, iba a quedar corto “para lo que el propio Plan plantea”.
Al mismo tiempo, destacó que el Presupuesto haya demostrado la “intencionalidad” de priorizar a “los sectores más vulnerados”. Para cambiar, según Cal, hay que “pensar seriamente, en un cambio de matriz tributaria para afectar mínimamente al sector más rico de la sociedad y materializar el Artículo N.°45 de la Constitución de la República: “todo habitante tiene derecho a gozar de una vivienda decorosa”.
“Sin una intervención activa, no se puede pensar en la construcción y en la solución de los grandes problemas sociales, y en particular el de la vivienda, sin una intervención activa del Estado como organizador de la demanda, como organizador de la propuesta del sistema de alquileres, de todo lo que tiene que ver con el sistema garantista que tiene que tener la parte más vulnerada y en la relación inquilino-arrendador”, arremetió.
Foto: Gustavo Castagnello
Fuente: fucvam













